sábado, 12 de septiembre de 2015

SOMOS LOS HIJOS PERDIDOS DEL MAR


El mar que ocupa la gran superficie del jardín la tierra nos alimenta a todos, tan generoso que deja en nosotros los habitantes de la tierra la responsabilidad de repartir sus frutos. El mar alberga en sus gigantes abrazos tantas especies, entre tantas poblaciones están mis hermanos los humanos, los hombres cerebro que han dejado hace tiempo de apreciar la belleza y el ritmo que tiene la propia vida.

En la juventud le temía al mar pero con los años me he dado cuenta que el mar me amaba así que poco a poco me he dejado envuelto en su abrazos gigantes como una luz pequeña en esta manta gigante de color azul. 

Los humanos en un tiempo record hemos convertido la tierra a nuestra forma de pensar, desfigurando lo bello con fines económicos, hemos conquistado los ríos y los bosques para construir un mundo artificial. Somos los hijos PERDIDOS del mar y nietos de la luna y el sol y no podemos negar la belleza extraordinaria de la vida. 

Todo crece y madura en este jardín menos nosotros los humanos, obsesionados en poseer la eternidad, el mar habla pero no hay oídos, la luna nos observa de noche y el sol de día nos riñe pero seguimos empeñados como unos adolescentes inmaduros la ruta artificial que no aporta nada.

El mar tiene el mismo lenguaje/ritmo que la propia vida solo nosotros los hijos perdidos en el jardín la tierra hemos dejado de respirar, admirar, saborear y amar esta perfecta totalidad que representa la vida. 

El mar a pesar de todo sigue su curso con naturalidad, las ballenas siguen contando cuentos para todas las especies, la luna sirve de manta para todos los hijos perdidos con la esperanza de que nos encontremos todos y vivamos la vida de forma responsable. 



1 comentario:

  1. El mar es la compañía perfecta para una soledad concienciada. El mar es vida y algo más que a veces no podemos apreciar.

    Si la tierra fuera mar,
    yo nadaría entre la arena...

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